Sobre el Ministerio de la Mujer
El Ministerio de la Mujer busca inspirar a las damas para profundizar su experiencia espiritual, potencializar sus dones en favor de la causa de Dios y comprometerlas con la restauración y salvación de las personas.
Esta iniciativa fue motivada por la señora Elena G. White. En 1898 la Sra. S.M.I. Henry, fue animada por ella para liderar el Ministerio de la Mujer. Esa obra que ella iniciara fue descontinuada después de su muerte. Solamente en 1990 se reinició este ministerio.
Abarca los siguientes ministerios:
El Ministerio de servicio, de oración intercesora, de evangelismo, de recepción, de conservación y de devoción personal.
EL MINISTERIO DE LA MUJER NO ES:
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Un foro donde las mujeres presentan reclamos, justificadas o no, contra los empleadores.
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El lugar para promoción de derechos iguales para las mujeres, aunque admitamos que ese sea un tema importante.
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Una mera fuente de entretenimiento u oportunidad de pasar horas en proyectos que simplemente promueven opiniones egoístas.
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Una plataforma para defender la ordenación de las mujeres, aunque reconozcamos que todas deben emplear sus talentos para la gloria de Dios y deben recibir el reconocimiento por el trabajo realizado para Su gloria.
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Un ataque a los hombres. No aboga la diferencia entre los sexos, ni está contra el sexo masculino.
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Un movimiento exclusivista. Los Ministerios de la Mujer desean la inclusión y no la exclusión de quien quiera que sea.
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El Departamento de Ministerios de la Mujer existe para defender, promover y desafiar a las mujeres adventistas en su peregrinación como discípulas de Jesucristo y a los miembros de la iglesia mundial.
Objetivos del ministerio de la mujer:​
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Este ministerio se propone:
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Fomentar el crecimiento espiritual y la renovación entre las mujeres.
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Afirmar que las mujeres son de inestimable valor en virtud de su creación y redención, y capacitarlas para servir en la iglesia.
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Ministrar al amplio abanico de necesidades que las mujeres tienen a lo largo de la vida, siendo sensibles a las perspectivas multiculturales y multiétnicas.
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Unirse y cooperar con otros departamentos especializados de la iglesia para facilitar el ministerio para las mujeres y de las mujeres.
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Crear buena voluntad entre las mujeres en la iglesia mundial que propicie lazos de amistad, apoyo mutuo, e intercambio creativo de ideas e informaciones.
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Guiar y animar a las mujeres adventistas, creando las condiciones para que vayan involucrándose en las actividades de la iglesia local a medida que alcanzan su potencial en Cristo.
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Encontrar medios y maneras para desafiar a cada mujer adventista a usar sus dones para complementar los talentos de otros, a medida que trabajan lado a lado para promover la misión global de la iglesia.